El Poder del Amor Incondicional


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Una Historia Verdadera
El Poder del Amor Incondicional
Caminante Mayor
Julio del 2.007

Esta tierna historia es verdadera.  Es la historia de un apreciada amiga mía a la que conocí hace mucho tiempo.  Ud. puede manifestar su Amor Incondicional siguiendo sus pasos.  Ella es un modelo a imitar y alguien que aplica en su vida los principios espirituales que estudia.  “Camina lo que habla.”  Ella desea por ahora permanecer anónima.  —Luis Prada

Publicado en este sitio web a pedido del autor el 7 de Agosto del 2.007.  Original en Inglés, traducción al Español por Luis Prada, Editor y Publicista de Brother Veritus’ Website.

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Después de la edad de 7 años la mayoría de nosotros pierde el amor incondicional el que sabemos es extremadamente difícil de volver a ganar.  Nuestra programación terrestre nos tiende a alejar de la Divinidad a una edad temprana.

Como Caminante Mayor mi vida entera me he sentido como si “Estoy entre vosotros pero no soy de vosotros”, me siento más confortable entre la gente asiática, aún cuando soy una americana caucásica. A comienzos de mis años veinte mis mayores espirituales me guiaron hacia los estudios místicos los que llegaron a ser una parte principal de mi vida.

Mi primer contacto cercano con la gente asiática fue cuando tenía 19 años de edad en el Japón y fui voluntaria para enseñar una clase de inglés en el Centro de Rehabilitación de Okinawa para Discapacitados, fue la primera vez que la mayoría de ellos hubieran visto de cerca de un americano. Tuve la habilidad aún entonces de mirar más allá de sus desafíos físicos y aceptarlos como se debería a cualquier otro ser humano.

Cuando finalmente regresé a los EE.UU., hice votos de que algún día retornaría a vivir en el Asia, pero la economía del Japón prosperó y su costo de vida se elevó por las cumbres que ese sueño se desvaneció dramáticamente.

Traté de mantener un vislumbre de esperanza llegando a ser amiga cercana de mucha gente vietnamita que venía a América después de la Guerra del Vietnam, y aún adopté como madre sustituta a una dama cuya madre vietnamita se murió hacía algunos años.

Ya acercándome a los 60 años de edad, un día cuando estaba navegando el internet llegué a un sitio de internet sobre Tailandia, ¡la Tierra de las Sonrisas!

Descubrí que el costo de vivir allí era muy bajo comparado con el que me sentía molesta tenía en América, y siendo la aventurera que soy, volé a Tailandia por unas vacaciones de 2 semanas. Fueron las mejores vacaciones que hubiera alguna vez tenido y me sentí aceptada y amada por mucha de la gente Tai que conocí.  Estaba agobiada por esta experiencia que cuando regresé a América, vendí casi todo lo que poseía y me trasladé a Tailandia.  ¡Mi sueño de vivir en el Asia se había hecho realidad!

Dentro de un corto período de tiempo llegué a establecer amistad con un ministro filipino y él me dijo que debería ser maestra de inglés, y empecé haciendo trabajo voluntario para ver si se adaptaba a mí.  Me llevó al Departamento Correccional de Muchachos del Ministerio de Justicia de Bangkok y me presentó al director quien pensó que era una maravillosa idea que yo enseñara una clase de inglés a la semana.  ¡Fue un gran éxito!  Había 30 muchachos, de 16 a 18 años de edad en mi clase y yo suministraba los materiales de enseñanza.  Después de 4 meses envié mi currículum vitae a una escuela bilingüe en la Isla Phuket y se me ofreció una posición de tiempo completo como maestra de primer grado, acepté y empecé a enseñar en cuatro días.

Para hacerme la vida más fácil quería vivir a distancia de caminar de la escuela, y empecé a buscar alojamiento.  En cuanto era guiada por el área por una de las maestras de la escuela Tai, ella recibió una llamada a su celular para traerme de regreso a la escuela.  El propietario de la escuela se acercó a mí y me ofreció alojamiento gratis en el dormitorio de los maestros Tai en la propiedad de la escuela, ¡qué maravilloso!

No tengo hijos propios, de manera que no he podido observar de cerca al amor incondicional.  De pronto mis estudiantes de primer grado (especialmente las niñas) querían coger mi mano, darme abrazos de un momento a otro, aún sentarse en mi regazo y me decían ¡que me amaban!

Tengo la habilidad de acercarme a la mayoría de niños, entender lo que los mueve o motiva, y me comunico muy fácilmente con ellos a su nivel.  Como maestro es de suma importancia poder ganar la confianza y amistad de los estudiantes de manera que pueda usted ayudarlos más fácilmente con sus estudios.

Pawasa [también conocida como Kein]

Panwasa a los 5 años de edad

Cada día cuando terminaba mis deberes de enseñanza comía en mi apartamento dormitorio Tai y luego caminaba generalmente a la escuela y me comunicaba con los Tais que trabajaban y vivían en la escuela.  Estos empleados eran cocineros, aseadores y personal de mantenimiento, ganaban salarios bajos y sus alojamientos de vivienda eran muy por debajo del estándar comparado con lo que los Americanos están acostumbrados, pero se sorprendería de qué tan felices son estas gentes con tan poco.

En cuanto me comunicaba con ellos notaba que había una niñita a quien la estaba cuidando su abuela quien era la cocinera principal de la escuela y había estado trabajando para el dueño de la escuela por muchos años.  Observé a esta niñita de distancia por quizá 2 semanas antes de acercarme lentamente a ella, los niños Tai son extremadamente tímidos.  Noté que tenía la mano izquierda torcida la cual no usaba y no dejaba que nadie se la tocara.  Finalmente su abuela empezó más a confiar en mí y me permitió más tiempo con la niña.

Los terrenos de la escuela son muy tropicales y elaboradamente diseñados.  Se me permitía llevar a la niñita de 2½ años de edad a tomar cortas caminatas por los terrenos, lentamente enseñándole inglés.  Gastaba de dos a tres horas con ella, de 5 a 7 días de la semana y dentro de 2 meses ambas anticipábamos nuestro tiempo juntas.  Ella disfrutaba pasando conmigo tanto que en cuando me veía caminado a la escuela corría tan rápido como podía para que la levantara en mis brazos en espera y empezaba a llamarme ¡Maestra Mamita!  El Amor Incondicional que florecía en nuestros corazones es como dicen verdaderamente, “Tu copa se derrama”.

Su nombre es Panwasa y no solamente era retada con su mano torcida, sino que también tenía agua en su cerebro con un tubo de derivación en la parte posterior de la cabeza y un tubo hacia abajo yaciendo bajo su piel a su estómago para drenar su fluido cerebral, la pierna izquierda con una ligera cojera y miopía en su ojo derecho.

Aún cuando algunas personas me trataban de desanimar de ayudar a esta niña, me pegué a ella por más de un año hasta que se me ofreció una mejor posición de enseñanza en Bangkok. Como podría haber adivinado fue muy triste para ambas cuando tuve que partir y no nos podíamos ver cada día.  Le di todo el mobiliario de mi apartamento a su abuela para que su vida fuera más cómoda.

Vuelo a Phuket y visito a mi Princesa Panwasa cada 45 a 60 días en fines de semana y festivos de tres días.  Entre los años escolares traigo a Panwasa a Bangkok por 7 semanas para que viva conmigo y vaya a mi escuela a mi clase. Le suministro suficiente cantidad de libros escolares extras, CDs/DVDs de aprendizaje y me aseguro de que tenga las ropas de la última moda para que se mantenga viéndose bien entre los otros estudiantes de su escuela.

El poder del amor incondicional me ha dado un verdadero propósito por fin en esta vida.

Ahora tiene 6 años y asiste a una escuela de inglés bilingüe en kindergarten. La retrasaron un año por su visión, de manera que cuando pasó un tiempo en Bangkok conmigo, la llevé al hospital de niños para que le hicieran un examen completo de los ojos y le compré 4 pares de gafas para ella.  También le di alguna terapia física para su mano torcida y bolas de ejercicio para usarla.  Panwasa es ahora la estudiante 2a más alta de inglés en su clase entre 25 estudiantes y su pronunciación del inglés es tan buena como la de cualquier niño estadounidense.  Le dije a su abuela que si Panwasa continúa obteniendo las más altas calificaciones a través del bachillerato le financio su educación universitaria.  Por cuatro a siete veces a la semana la llamo por mi celular para hablar sobre el día de cada una, le cuento historias y hablamos muchas aventuras felices que hemos tenido y sobre nuestro futuro juntas. Panwasa trae tanto gozo y amor a mi vida, y si nos viera juntas de seguro que pensaría que ella es mi verdadera hija.

He tenido éxito como profesora de kindergarten por los 3 años de mi carrera de 5 años en la enseñanza aquí en Tailandia, y doy gracias por cada día que estoy rodeada de tanto amor incondicional de mis estudiantes.

El poder del amor incondicional me ha dado un verdadero propósito por fin en esta vida.  Manténgase dándolo sin pensar que vaya a recibir alguna cosa de regreso y nuestro Planeador Divino y su Verdadero Ser le permitirán ganar de nuevo su Amor Incondicional perdido.

27 de Diciembre del 2.007: Pasé los anteriores 7 días en la Isla Phuket presentándole a Panwasa la maravillosa magia de Papá Noel y durante mi alegre permanencia con ella pude hablarle a su maestra de clase “Donna”. Quedé agradablemente sorprendida al enterarme que Panwasa ahora es la estudiante más sobresaliente de su clase, obteniendo las más altas calificaciones en Inglés, Fonética, Escritura, Matemática y Ciencias.  También Donna dijo que Panwasa es una estudiante que se comporta muy bien y es amable en su clase.

El maravilloso lazo de Amor de Panwasa y yo ha continuado creciendo más allá de mi imaginación.  No sólo a menudo ella dice que me ama sino que dice de su propia cuenta “Gracias por ayudarme!”

(CONTINUARÁ)

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