Una Explosión de Luz Espiritual
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Una Explosión de Luz Espiritual
Pronto veréis una explosión de Luz como nunca la habíais visto antes
Dios canalizado a través de Gloria Wendroff. De http://heavenletters.org/angelsplace/index.php. Publicado en este sitio web el 2 de Octubre del 2.005. Original en Inglés, traducción al Español por Luis Prada.
Dios dijo:
Que se haga la Luz. No dije Que haya pena. Dije Que se haga la Luz. Y así os mandé a la Tierra a iluminarla. No por ninguna otra razón. ¿Cuál podría ser otra razón?
Cuando dejáis que brille vuestra Luz, estáis siguiendo Mi voluntad. Brillarla debéis. Brillarla deberéis.
Brilláis vuestra Luz, no para vosotros, sino para iluminar al mundo. El mundo necesita de vuestra Luz para brillar. No podéis alumbrar la Luz de otro. Solamente la vuestra. No obstante vuestra Luz prende las otras luces. Así es como trabaja.
Brilláis vuestra Luz de acuerdo con vuestra visión, sin embargo brilláis más Luz que la creencia que sostenéis de vosotros. A pesar de vuestra limitada opinión, vuestra Luz brilla. Continuáis Mi Luz en la Tierra.
Es la Luzsola la que sostiene al universo. La Luz es vital. La luz del sol y de las estrellas es asombrosa, no obstante es luz menor que la vuestra. Empezad a tener una idea de qué tan brillante vuestra Luz es. La veo dondequiera que voy. Vuestra Luz es Mi Luz retornada. Vosotros simplemente retornáis Mi Luz a Mí. Es como un cometa. Todos los ojos miran a Mi Luz en cuanto ella va en curso por el cielo, Mi Luz en vosotros.
Si os olvidáis de ello o no, Mi Luz en vosotros brilla. No podéis apagar Mi Luz, sino que podéis incrementarla y mantenerla brillante. No es gran cosa que Mi Luz brille a través vuestro, y no obstante es lo que importa, y hacéis una gran cosa de ello, como si fuerais incapaces. Sois reservados acerca de ello. Soistímidos de la Luz. Ahora reconozcáis que sois un Ser de Luz. La Luz y el amor son intercambiables. Mi Luz es la Luz de amor. No es una producción. Es Luz natural.
Sois una luciérnaga que nunca para.
Vuestra Luz es universal. No os pertenece. Pertenece al don de la vida. Es el don de la vida.
Vosotros quienes fuisteis concebidos en el Cielo sois nacidos de Mi Luz. ¿Qué esperáis hacer en la Tierra sino brillar? ¿Se os ocurrió justo este pensamiento?
No ilumináis la Tierra con fanfarria. No es eso, en cuanto entráis a un cuarto, todos los ojos se torna a vosotros. Es que el cuarto se vuelve más brillante por vuestra presencia. Nadie tiene que daros crédito, sino que os lo podéis dar a vosotros mismos. Tened conciencia de la Luz que brilláis. Alumbradla por su valor. Alumbradla por Mí. Nuestra Luz es digna muchísimo.
Este arreglo es entre vosotros y Yo. Lo que tenéis que hacer es brillar Mi Luz. No tenéis que anunciarlo. No tenéis que decir: “A todos, noten mi Luz. La alumbro para vosotros.” Silenciosamente dais Luz. No es para vosotros el ser notados. Es para que vuestra Luz brille. El ser notados es un subproducto. Por la Luz de vuestra Luz, todos notan la propia. Quizá su Luz estaba en un bolsillo, pero ahora ellos la sacaron y brilla también. La Luz puede sólo alumbrar. Puede alumbrar un cuarto entero. Puede alumbrar el universo entero. Vosotros disparáis la Luz. Vosotros encendéis la Luz. Pronto habrá una explosión de Luz como nunca la habíais visto antes.
La Luz va por todo el mundo. No va a atenuarse de nuevo.
Pronto vais a despertar a un nuevo mundo. Estaréis en un aturdimiento de Luz. La Luz estaba siempre allí, pero hasta ahora la veis. La veréis como nunca las habíais visto antes. La veréis por primera vez, y veréis que sois la Luz que veis.
Un Entendimiento Tan Brillante
Dios Dijo:
¿Qué pasa si es verdad? ¿Que realmente estoy contenido en todo lo que os rodea? ¿Qué pasa si estoy realmente en cada objeto y cada imagen de cada objeto? ¿Qué pasa si en realidad estoy en vosotros? Si estoy en cada cosa que miráis, estoy contenido en vosotros quienes sois quien mira también.
¿Qué pasa si en realidad no hay nada allá para que veáis, y que es vuestro propio reflejo el que veis a través de vuestros ojos? ¿Qué pasa si todo es vosotros? ¿Qué pasa si estáis allá afuera y aquí adentro? Sois el adentro que puede también ser visto afuera? ¿Qué pasa si pudierais mirar adentro y ver el corazón y el alma vuestros y encontrarme allí?
¿Qué pasa si todo afuera y adentro es Yo Mismo? ¿Qué pasa si soy Yo quien actúa todos los guiones? Pero me llegué a enamorar tanto de una parte u otra, que empecé a pensar que la parte era lo que yo era. ¿Qué pasa si compré Mi propia actuación?
¿Puede eso ser? ¿Podéis ser Yo Mismo en otra vestimenta? ¿Y todo lo demás que habéis pensado sólo fantasía? Si es éste el caso, ¿qué significaría, y qué significaría para vosotros? Es sorprendente, ¿no es verdad? Pero no es sorprendente en absoluto para el corazón.
La mente no puede comprender lo que el corazón ha sabido siempre. No son sólo los meros actores en el escenario. Había una historia detrás de vosotros que habéis olvidado. Habéis olvidado vuestra eminencia. Pensasteis el pequeño escenario y vuestro pavoneíto y hurgueo fueron una extensión vuestra.
¿Qué pasa si fuerais realmente Yo pero en una forma contraída? Si ése pudiera ser el caso ¿qué hay allí para vosotros por hacer más que expandirse a Mi tamaño? ¿Qué pasa si vuestro corazón se expandiera más allá de sus llamados límites y se fundiera con el Mío, el Corazón Original? ¿Cómo entonces sería vuestra vida?
¿Qué pasa si realmente conocierais vuestra Herencia y botarais vuestros disfraces? ¿Qué pasa si botarais ese pequeño ego imitador y reclamarais la Realidad y os atrevierais a ser la grandeza que es la verdad vuestra en vez de la pequeñez de vosotros que el mundo perpetró sobre vosotros y vosotros perpetrasteis sobre vosotros mismos.
¿Qué os hace tan duro pensar aún acerca de la Realidad vuestra? Es más fácil para vosotros burlarse de la idea de la grandeza en vosotros que permitir la posibilidad de la grandeza que sois.
Entonces os preguntáis: “Bien, si esto pudiera realmente ser verdad, y yo soy más que lo que me he permitido alguna vez contemplar, ¿cuál sería la diferencia? ¿Como qué sería esto? ¿Como qué sería yo? ¿Me elevaría de las cenizas de mi vida actual? ¿Tendría un nombre diferente o me trasladaría a una casa diferente? ¿Qué significaría en realidad?”
Diríais aún más: “Sé que usaría el mismo cuerpo. Mi caminar sería el mismo. Aún usaría los mismos zapatos. Mantendría mi misma familia. Al menos no podría cambiar lo que son y lo que ha sido mi pasado. ¿En dónde empiezo?”
Entonces volvéis a Mí y preguntáis: “Querido Padre, si éste fuera el caso de que yo puedo ser más de lo que Tú decís, que puedo ser más de Ti, decidme cómo parecerá eso. ¿Cuál sería mi primera acción? Padre, estoy dispuesto a ser todo lo que deseas de mí, pero no sé cómo hacerlo aún si realmente creyera que pudiera ser hecho. ¿Me volvería Cristo? ¿Cómo cambiaría? ¿Qué sería cambiado?”
Cuando sepáis en vuestros huesos la magnitud de vosotros, vuestra completa postura en la vida cambiaría. En un momento vuestros ojos verían diferente. Vuestro corazón repicaría diferente. El mundo entero sería cambiado ante vuestros ojos cuando lo miráis, y por consiguiente sería cambiado.
No os volveríais el Cristo. Sois el Cristo. Fuisteis vosotros quienes caminaron por la tierra y parecieron que curaron a aquéllos que lo desearon. Cuando os volvéis la verdad de vosotros, re-ganaríais vuestra vista primera. No salvaríais a la gente, porque sabríais que no podéis salvar a lo que está ya seguro en Mis brazos. No sanaríais a la gente. Veríais la salud, y eso sería llamado curación. Cristo no hizo otra cosa que caminar la tierra.
Tendréis una conciencia tan brillante que podéis solamente ver la verdad. No tendréis que hacer cambios en vosotros. Seríais alumbrados, eso es todo. Y la luz alumbra.
Cristo vio un mundo diferente de lo que vieron los otros. Eso es todo. Él reconoció Mi Luz en todas partes. Nunca fue engañado. Sus torturadores no lo podía engañar. Él sabía quienes eran aún cuando ellos no lo sabían. Justo en la medida en que conozco la verdad de vosotros, él sabía lo mismo. Él plantó su corazón en el vuestro, y no pidió nada más que lo conocierais.
Empezad a conocer la posibilidad en vosotros. No hay acción para que vosotros toméis. No hay nada en lo que os volváis. Sólo permitid que la verdad se consuma en vosotros, y la verdad se elevará.
Continuaremos esto más tarde.
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